En este apartado haré una breve referencia cronológica a los acontecimientos que sacudían contínuamente la "paz" de nuestra provincia. Es un periodo de tiempo, el de la Guerra de la Independencia, que mucha gente piensa que nos afectó únicamente al finalizar el conflicto en 1813, con la batalla de Tolosa, el sitio de San Sebastián y Guetaria, y la batalla de San Marcial.

         En efecto, estas acciones son las más conocidas, pero a lo largo de esos tristes años, se sucedieron, principalmente a lo largo de la Carretera Real, sangrientos hechos, a modo de emboscadas, asesinatos, y secuestros, que impedían un normal desarrollo de la vida, tanto a los lugareños como al ejército imperial.

          He tratado de organizarlo de manera escueta y esquemática, con la intención de que el lector que lo consulte, se haga una rápida idea del enorme problema de seguridad que se produjo en nuestras rutas de comunicación y en las poblaciones guipuzcoanas.

            Indico al lector, que este trabajo lo he basado solamente en la relación dada por una publicación francesa, por lo que los datos en él recogidos pudieran diferir de fuentes del otro bando. No quiero enredarme en estudios más complejos, al ser mi intención, únicamente, el mostrar al lector la dificultad de vivir esos años en nuestra tierra.

 OCUPACIÓN

         Tras la ocupación de España por los ejércitos franceses en 1808, los primeros momentos no son excesivamente preocupantes para la seguridad de los transportes y viajeros del ejército napoleónico. La superioridad numérica es aplastante y el factor sorpresa decisivo.

            La falta de comunicaciones y transportes seguros, la continuas requisas del ejército francés y de las partidas guerrilleras, hicieron que la provincia se encontrara prácticamente arruinada para el final de este sangriento conflicto armado. A este problema económico, hay que añadir la inseguridad personal de los habitantes, expuestos a represalias, tanto francesas como españolas, por colaborar o no hacerlo con sus respectivos bandos. El descontento entre los naturales empieza a ser generalizado, y las primeras partidas de los que serán denominados "bandidos" comienzan a dificultar el libre tránsito de los franceses.

             Con el transcurso del tiempo, la resistencia en forma de guerrilla, va engrosando sus filas con desertores del ejército ocupante, principalmente con alemanes, italianos y polacos, que como consecuencia de su instrucción militar, aumentan considerablemente la efectividad de estas partidas. Este tipo de guerrilleros, eran los más combativos a la hora de luchar contra las columnas francesas, ya que sabían que en caso de caer prisioneros serían inmediatamente pasados por las armas. Las represalias y castigos contra diversas poblaciones por parte del ejército de ocupación, así como el espíritu patriótico de las gentes de la época, harán que estas partidas, para comienzos de 1812, se hayan convertido en auténticos ejércitos, integrados por varios miles de hombres, con caballería e incluso artillería.

            En nuestras provincias costeras, hay que contar también con el hecho del apoyo que estas partidas tenían, tanto en hombres para acciones de hostigamiento puntuales, y principalmente materiales, armas y municiones, proporcionado por la Armada Británica. La campaña conocida como Basque Roads, fue un auténtico quebradero de cabeza para los mandos napoleónicos, que se veían imposibilitados para frenar este continuo suministro a las bandas guerrilleras, sobre todo a partir de 1812.

           Para comienzos de 1810, las tres provincias vascas pertenecían al 4º Gobierno Millitar, al mando del General Thouvenot, quien se encontraba, así mismo, a las órdenes del General Caffarelli. La situación se ha deteriorado considerablemente para comienzos de este año, por lo que Thouvenot recibe refuerzos de la Gendarmería, ofrecidos por su General Buquet. Estos refuerzos consistirán en cuatro escuadrones de la Gendarmería, con un total aproximado de 701 hombres de a pie y 273 de caballería.

          En la provincia de Guipúzcoa, entre el 1 y 2 de Marzo de 1810, se desplegaran el 3º y 4º escuadrones distribuidos de la siguiente manera:

 3º Escuadrón:

                 Salinas                   En la casa del Pueblo debidamente fortificada.

                 Mondragón             En la casa del Pueblo debidamente fortificada.

                 Vergara                  En la casa del Pueblo debidamente fortificada.

                 Villareal                  En la casa del Pueblo debidamente fortificada.

                 Villafranca               Población amurallada. En una casa usada como barracón.

                 Tolosa                   Población amurallada. En una casa usada como barracón.

 4º Escuadrón:

                Tolosa                     Comparte puesto con el 3º escuadrón.

                 Hernani                  Villa cerrada. En la casa del Pueblo debidamente fortificada.

                 San Sebastián          Ciudad amurallada con una Fortaleza.

                 Venta-Rentería         En una casa aislada rodeada de una empalizada.

                 Irún                       En la casa del Pueblo debidamente fortificada.

Todos los nombres de lugares y poblaciones recogidos en este trabajo, responden a sus antiguas denominaciones de comienzos del s. XIX. Lo hago para facilitar la búsqueda a historiadores extranjeros, para los que las nuevas denominaciones, algunas totalmente distintas, tienen que significar una complicación añadida a sus investigaciones.